Saber que los QR son un método recurrente para enlazar soportes físicos con links de Internet de forma sencilla está muy bien, pero no se nos olvide usarlo bien de verdad. De lo contrario, vamos a parecer ingenuos y poco atractivos para el lector o consumidor.
¿A qué me refiero?
A QR invertidos.
En concreto me refiero a tener el dibujo de este código, que en principio suelen ser cuadrados y rectángulos, sobre un fondo negro.
Hay que evitar tener este código en un color claro, ya que el software de muchos dispositivos, no es capaz de reconocer el dibujo sobre un fondo negro. Esto se debe a que no hay una estandarización en los diversos programas que se usan para escanear QR. Es jugar a la suerte, y tal vez el usuario que intenta escanear ese QR tiene justo el programa que reconoce un QR invertido, pero tratándose justo, de ser rápido, debemos evitar perder tiempo.
Solo puedo mencionar que hace poco empecé un curso donde ofrecían un PDF informativo, llenos de links en formato QR, y ni uno pude escanear con mi móvil ni en un escáner de QR online. Descarté por completo retocar cada QR para poder obtener el link con esa valiosa información, ni tengo el tiempo de encontrar un servicio online que escaneé QR invertidos.
La tecnología QR tiene que ser sencilla de usar. Redundate es que QR hace referencia justo a ser un código de respuesta rápida.
